Tercer Domingo de Adviento en Hermandades del Trabajo-Centro de Madrid

Ayer, tercer Domingo de Adviento, se vivió de una forma especial en Hermandades del Trabajo-Centro de Madrid

Lo celebramos con un Recital de poemas navideños teatralizados interpretados por el Aula de Teatro Senior “Nearón Teatro”, dirigidos por Rafael Negrete-Portillo

Previamente, se celebró la Eucaristía que fue presidida por el Consiliario de Hermandades del Trabajo-Centro de Madrid, Ignacio María Fernández de Torres y concelebrada por el sacerdote adscrito al Centro de Madrid, Natalino Rendo Abril.

Homilía

En su homilía, Ignacio María nos decía, que “debíamos preguntarnos cuál es nuestra alegría como cristianos”. El Evangelio de Lucas nos decía que nuestra alegría es que viene el Señor a nuestras vidas, “viene alguien que quiere hacerse compañero y cómplice de nuestro viaje para hacernos grande la vida”, señaló Ignacio María.

Posteriormente, el Consiliario de Hermandades del Trabajo-Centro de Madrid se preguntaba “qué es una vida grande en términos evangélicos”. “Es una vida en la que somos capaces de querer, de acoger y perdonar. Donde somos capaces de buscar lo que es justo y somos capaces de descubrir que esta vida es un anuncio de una vida mejor. Recordaba Ignacio María a D. Abundio García Román, Fundador de las Hermandades del Trabajo quien decía que Dios “nos da la vida para ser constructores de su reino”.

La defensa y promoción de la dignidad humana

Además, señalaba que el sueño de las Hermandades del Trabajo en sus más de 70 años de historia, el motor que ha movido a decenas y decenas de militantes a dejarse la vida ha sido creer en los sueños de Dios y luchar para que esos sueños se hagan realidad. Sueños de Dios que éticamente los podemos resumir en: la defensa y promoción de la dignidad humana y de los derechos humanos y que siguiendo las enseñanzas de la Doctrina Social de la Iglesia podemos decir que son el compromiso firme y determinado de la promoción en el desarrollo integral de todo lo humano.

Por último, el Consiliario del Centro de Madrid concluía su homilía preguntándose si realmente nos hace feliz nuestra vida y el mundo que tenemos. “La Navidad es una gran apuesta de Dios, en la Navidad Dios se lo apuesta todo el amor. Aquí la cuestión es a qué nos vamos a jugar nosotros la vida a fiarnos del hijo de Dios o a seguir fiándonos de nosotros mismos”, concluía.

Significado de la Navidad para dos militantes de Hermandades del Trabajo

Tras la homilía, dos militantes de Hermandades del Centro de Madrid contaron qué significa para ellos la Navidad. Para José David Belén es “motivo de alegría y un momento para compartir en familia”. Señalaba que en los últimos años la navidad ha sido un “poco más difícil por la distancia con la familia, Dios ha sabido ayudarme y ha traído a mi vida la familia de Hermandades. He convivido muchas navidades con unos y con otros con mucha alegría y felicidad”.  Por último, indicó que la Navidad es “la esperanza que nos da ese Niño Jesús que nos ofrece la salvación del mundo y que nos demuestra lo que es el amor”.

Para Conchita Vicente son días grandes en su vida ya que Jesús viene cargado de gozo, amor y alegría. Señaló que en esta Navidad se quiere preparar para “dejar el egoísmo a parte para que venga el sentido de la gratuidad y la humildad”. Finalizó su intervención indicando que “el espíritu de la Navidad es grande porque inunda nuestras vidas y porque nos hace acercarnos a los demás con alegría en este mundo en el que tenemos tanta tristeza, tanta desolación”, finalizó.

Recital de poemas

 

Recital de poemas a cargo de la compañía teatral Nearón Teatro

Este Tercer Domingo de Adviento se cerró con el Recital de poemas “Aqueste lado del proscenio”, un recital escénico navideño en once poemas y doce campanadas, a partir de composiciones poéticas de Miguel Hernández, Federico García Lorca, José María Pemán, Gerardo Diego, Rubén Darío, Sor Juana Inés de la Cruz, Lope de Vega y Luis de Góngora.