Entrevista a Luis Hernández Vozmediano, Director de Cáritas Diocesana de Madrid: Cerca de un tercio de la población pobre tiene un empleo

En 2017, D. Carlos Osoro, Cardenal Arzobispo de Madrid, nombró a Luis Hernández Vozmediano Director de Cáritas Diocesana de Madrid. Ingeniero aeronáutico de formación y profesión, padre y abuelo, Luis Hernández comenzó su relación con Cáritas, como voluntario, enfocándose en la ayuda a los más vulnerables: colaboró en la Residencia de Valvanera para personas sin hogar con enfermedad mental grave y en el Centro de Información y Acogida a personas sin hogar, CEDIA 24 horas.

Luis Hernández Vozmediano, Director de Cáritas Diocesana de Madrid (Foto HHT Madrid)

Decía el Papa Francisco en una audiencia que concedió al Consejo de Cáritas, con motivo de su 75 aniversario, que con independencia de las creencias o ideologías Cáritas se había ganado el respeto de la sociedad española. Su labor de apoyo, ayuda y asistencia a las personas más vulnerables, sus campañas y sus convocatorias para movilizar a la población en el caso de crisis puntuales son ejemplares por los resultados que consigue.

Hablamos con Luis Hernández Vozmediano de las líneas de acción de esta institución de la Iglesia de Madrid, con la que Hermandades del Trabajo comparte lazos. Es el caso de la Campaña por el Empleo, en la que participa nuestra entidad.

Cáritas Madrid tiene varias campañas principales durante el año, pero también está ahí en los momentos de crisis o acompañando siempre a las personas más vulnerables: acogiéndolas, escuchándolas, mitigando en lo posible necesidades materiales, trabajando con menores para que no hereden la pobreza de sus padres; ayudando a los que se quedaron sin trabajo y sin recursos acompañándolos para que puedan volver a tener una vida autónoma.

Otra labor relevante es la sensibilización a la sociedad de esta realidad muchas veces invisible a nuestros ojos.

También está ahí en los momentos de crisis o acompañando siempre a las personas más vulnerables: acogiéndolas, escuchándolas, mitigando en lo posible necesidades materiales

El PIB en España ha crecido poco e incluso se ha estancado en los últimos años. ¿Cómo ha influido, en datos, en los índices de pobreza infantil y la de los trabajadores?

En España ni siquiera en las etapas de mayor crecimiento del PIB hemos conseguido reducir la pobreza al ritmo que habría sido esperable. En cambio, las crisis económicas sí han tenido un rápido reflejo en la pobreza de las familias, la pobreza infantil y de los trabajadores.

Según los datos del Instituto Nacional de Estadística, más de una cuarta parte de la población menor de 18 años reside en hogares con ingresos inferiores al umbral de pobreza. Este dato apenas ha mejorado durante la última década. Respecto a los trabajadores, la situación también es preocupante.

Luis Hernández en su despacho de Cáritas Diocesana

Los datos del INE reflejan que cerca de un tercio de la población pobre tiene un empleo. De las personas atendidas en Cáritas Diocesana de Madrid en el primer semestre de 2023, cerca de una cuarta parte tenían un empleo por cuenta ajena.

En su opinión ¿Qué se debe hacer, desde las administraciones públicas y desde la sociedad civil, para que estas ratios de pobreza se reduzcan y homologuen a los países de similar nivel de desarrollo?

La Administración pública tiene una responsabilidad difícil y compleja.

Por un lado, es necesario que se promuevan las condiciones apropiadas para el desarrollo económico, para la creación de empleos que permitan a las personas vivir con cierta calidad de vida o para que el acceso a la vivienda esté al alcance de las personas.

Una cuestión clave será la integración de las personas migrantes que llevan tiempo en nuestro país y cuyas familias se ven abocadas a situaciones muy difíciles. Por otro lado, la Administración pública debe organizar los servicios públicos y las prestaciones para proteger especialmente a las personas más vulnerables.

Uno de los retos que tienen es no perder la referencia de que el bien común debe guiar sus decisiones, sin dejarse llevar por la tentación de medidas que dan votos a corto plazo. Cuando se pierde esta referencia, las prioridades del gasto público cambian, perjudicando a las personas más débiles.

El primer paso como sociedad civil sería concienciarnos sobre los problemas sociales, que no nos dejen indiferentes. Si no están entre las prioridades para la sociedad civil, tampoco serán una prioridad para la Administración pública y los partidos políticos. Y no serán posibles políticas de consenso, a largo plazo, tan necesarias para desarrollar medidas como la construcción de vivienda social.

El fuerte aumento de la inflación y de los precios de la energía están haciendo mella en la clase media y en la población de menores ingresos. ¿Podría darnos alguna cifra de cómo están incidiendo estos problemas en la población española y en el volumen de ayudas que CÁRITAS presta?

Según los datos del INE referentes a 2022, han aumentado las personas que no pueden mantener su vivienda con una temperatura adecuada (afectando al 17,7 % de la población), que no pueden permitirse una comida de carne, pollo o pescado al menos cada 2 días (5,4 %) o que tienen dificultades o muchas dificultades para llegar a fin de mes (22,1 %). En el caso de las ayudas prestadas por Cáritas Diocesana de Madrid, en el primer semestre de 2023, el gasto en ayudas económicas directas a las familias para cubrir necesidades básicas aumentó por encima del 30 % respecto al mismo periodo del año anterior.

En el caso de las ayudas prestadas por Cáritas Diocesana de Madrid, en el primer semestre de 2023, el gasto en ayudas económicas directas a las familias para cubrir necesidades básicas aumentó por encima del 30 %

Un momento de la entrevista con el Director de Cáritas. Foto HHT Madrid.

A través de varias empresas de inserción social para personas en riesgo de exclusión, promovidas por Cáritas, en cierto modo, la entidad también se ha convertido en “empleadora”. ¿Cómo ayudan estas empresas a la inserción?

Estas empresas son una oportunidad para aprender un oficio concreto y adquirir habilidades laborales trabajando, con el apoyo de orientadores. Esto aumenta las posibilidades de que la persona encuentre un empleo normalizado, mejora su autoestima y es una oportunidad de desarrollo personal. Cáritas busca que las personas puedan salir adelante por sí mismas siempre que sea posible. Estamos muy satisfechos con esta iniciativa que está obteniendo unos índices de inserción del orden del 67 %.

¿Cuáles son, en su opinión, los principales retos que asociaciones como Cáritas, u otros movimientos de la Iglesia, van a tener que enfrentar de forma inmediata?

El primer reto es vivir con mayor coherencia las propuestas del Evangelio y encontrar formas para trasmitirlas a la sociedad. Es un reto complicado en una cultura con tanta saturación de información y entretenimientos.

Tenemos que experimentar formas de encontrarnos con personas que no están en ninguna parroquia ni en ningún movimiento e integrarlas en nuestras organizaciones; que quieran unirse a la misión, pero desde puntos de partida diferentes. Otro de los retos será intensificar las colaboraciones dentro de la Iglesia, buscando caminos para una mayor unidad, con entidades que no forman parte de la Iglesia, asumiendo un cambio de papel, con menos recursos e intentando ser sal para esta sociedad.

La labor que realiza Cáritas de Madrid sería imposible sin la contribución y respaldo de la sociedad.

El papel del laico, como trabajador, colaborador o voluntario, con su apoyo en los momentos críticos o con su colaboración económica pone en valor su labor en la Iglesia. ¿Estamos respondiendo correctamente al llamamiento a la caridad del Papa Francisco o queda camino por recorrer?

Esta pregunta es la que tenemos que hacernos cada uno de nosotros e intentar actuar en conciencia. La labor que realiza Cáritas de Madrid sería imposible sin la contribución y respaldo de la sociedad. Contamos con personas que colaboran con su misión a través de donaciones y legados y también con el apoyo de múltiples empresas e instituciones. En 2022, la financiación privada de Cáritas de Madrid supuso el 82 % de nuestro presupuesto, con más de 19.000 donantes y suscriptores, y más de 8.000 personas voluntarias que dedicaron su tiempo a esta labor de la Iglesia.

Por Guadalupe Mejorado.

La entrevista ha sido previamente publicada en nuestra revista “A Hombros de Trabajadores”, N.º 3. Diciembre 2023, en papel y digital